Tan solo duerme...

Explosiones que te desarman por completo, en un sinfín de situaciones, creadas plenamente para hacerte caer en picado en un agujero hacia el vacio.

Lamentos en silencio que gritan para que los escuches, sólo tú puedes hacerlo.

Agitar los brazos desesperadamente para que te vean en la más siniestra oscuridad.

Creencias que contradicen actitudes y maneras de pensar en cuestión de segundos.

Mirar y querer correr hacia el lado contrario de la dirección de tus propios ojos.

Enternecedoras palabras que se tornan en un parpadeo para cantar una historia completamente diferente a la que estabas acostumbrado a oír.

Las campanas de una iglesia están dentro de tu cabeza y son martillos golpeando en madera, irrumpiendo tu tranquilidad.

Burbuja en implosión, gravedad que eleva tus ganas de desaparecer, sin que nadie te vea hacerlo ni pregunte por ello.

Latidos a la velocidad de la luz que no quieres controlar, no sabes el motivo pero tampoco quieres saberlo, ya está pasando, para qué planteártelo? ...sería una pérdida de tiempo.

Respiras una y otra vez sin que llegue el aire a tus pulmones, en tu cabeza la presión te paraliza, cuando la realidad es que quieres correr y huir a algún lugar donde la nada y tú sean los únicos partícipes.

Tan solo duerme, deja caer tu cuerpo sobre las sabanas del sueño, donde podrás liberar toda esa energía que retienes en tu interior, tan real como la luz del sol.

Tan solo descansa, mañana en la calma del despertar podrás vivir un nuevo día y dejar tus ansias y desesperaciones a un lado...

Que tengas dulces sueños...